Amarrados en Marina de Denia, Pantalán C – Amarre 42

Aquí estamos, otra vez los tres fratellis a punto de partir. No se extrañen, ya sé que estamos a finales de agosto, y todos los años por estas fechas el Irenea yacía plácidamente en su amarre. Este años se han producido algunos imponderables que nos han trastocado todos los planes. Nada grave que no podamos soportar. En la vida hay que saber adaptarse y disfrutar.

Nuestra primera intención, a finales del 2012, era navegar hasta Croacia en junio, invitando otra gente y amigos, y dejando la navegación de los fratellis recorriendo la zona para julio. Retornaríamos el barco hasta Sicilia, y con otra gente haríamos el salto final hasta Denia. Por diversas razones la descartamos, y realizamos un plan menos ambicioso, que incluía navegar hasta Marsella, y da ahí hacer el salto hacia Córcega, que recorreríamos en sentido horario.

A mediados de mayo destinaron a Manuel a Bruselas, con incorporación el día 26 de julio, lo que de nuevo volvió a modificar los planes. Así que cambiamos nuestra tradicional navegada larga por salidas más cortas.

A primeros de mayo fuimos a Palma de Mallorca; nunca habíamos recalado en este puerto, y ya era un poco escandaloso. Coincidimos con su salón náutico, incluida la muestra de Super Yates.

A primeros de Junio bajamos a Santa Pola, y retronamos tranquilamente con buen viento, haciendo una recalada en Morarira, donde tantas veces habíamos parado con el Ataifor, base para nuestros saltos a las Baleares,  pero nunca habíamos amarrado con el Irenea. Todo sigue más o menos igual, el dique sur como pantalán de transeúntes, con amarre abarloados.

El 21 de junio subimos a las Columbretes. Navegamos el viernes de noche, con viento de proa, y llegamos sobre las 11:00 de la mañana después de dar unos cuantos pantocazos. Se nos adelantan tres veleros que vienen de Castellón y Valencia, pero encontramos boya libre. Al llegar se reporta una emergencia en uno de los barcos de buceo que trabaja la zona, y un helicóptero tiene que hacer la evacuación. Cuando estamos terminando la visita guiada, nos avisan de que nuestra madre ha empeorado de su delicado estado de salud, por lo que salimos directamente dando rumbo a Castellón, y luego a Denia, donde llegamos a las 05:30 horas.

El 5 de julio a última hora salimos de nuevo con rumbo directo a Ciudadela. Pasamos por la costa Norte de Ibiza y Palma, y a la amanecida del día 7 ya estamos fondeados en Cala Perajals, donde disfrutamos de un buen baño. Todo el suelo arenoso estaba lleno de peces manta. No había nada de viento, pero vemos que nuestra nueva ancla Rocna funciona perfectamente. Sobre las 11:00 nos vamos a Ciudadela, donde estuvimos un par de días. Aunque los días anteriores ha hecho mal tiempo, toda esta semana es de calma chicha. Luego nos fondeamos en Trebaluger y en la Isla del Aire, para amarrar finalmente en Mahón un par de días. Cuando vamos a salir hacia Denia, Mateo amanece con la cara completamente hinchada; tiene una reacción alérgica a unas escupiñas que se comió en estado dudoso, así que lo tienen hospitalizado por unas horas. Todo queda en un pequeño susto, y a mediodía salimos para Denia, donde llegamos el día 14 a las 02:00 horas. Toda la Marina está llena de chavales haciendo botellón, pero nosotros no conseguimos un bar que nos dé una copa. Al final pedimos hielo al marinero, y nos la tomamos en el barco. Como en casa, en ningún sitio.

Manuel se fue a Bruselas, pero planificamos una última navegación de verano, siempre que la incorporación de su nuevo destino lo permitiera. Y en eso estamos, a punto de salir hacia Marsella. 360 millas por delante. Pronostico de vientos ligeros.

Seguiremos informando.